Por Redacción Poder Ciudadano | Querétaro, Qro.
Una ciudad que presume modernidad, pero ignora el miedo con el que viajan las mujeres todos los días. Esa es la dura conclusión que deja la nueva encuesta presentada por la Asociación Civil Pedaleanda, que destapa una verdad incómoda y peligrosa: el transporte público en Querétaro es un espacio de riesgo constante para las mujeres.
👉 De acuerdo con los resultados del estudio, el 32% de las mujeres encuestadas ha sido víctima de acoso o agresión sexual en el transporte público, y el 70% se siente insegura al trasladarse en espacios como el Qrobús.
Más alarmante aún: el 54.3% vive con miedo de ser agredida mientras se transporta.
💬 “Esto no es percepción, es una realidad cotidiana”
María del Mar Covarrubias, representante de Pedaleanda, explicó que el objetivo del estudio fue ponerle rostro y voz a lo que muchas ya sabían, pero nadie quería medir:
“Queremos mostrar cómo la violencia y el acoso sexual afectan los trayectos diarios de las mujeres. La Ley de Movilidad habla de igualdad, pero en los hechos, la inseguridad limita el derecho a moverse libremente.”
🛑 Inseguridad que cuesta: las mujeres pagan más para protegerse
Uno de los hallazgos más crudos del estudio fue que el 77.5% de las mujeres incurre en gastos extras para evitar ser agredidas, ya sea tomando taxis, cambiando rutas, o viajando acompañadas.
“La seguridad se ha vuelto un privilegio. Las mujeres pagan con dinero y con miedo todos los días”, señaló Covarrubias.
📉 Una ciudad que expulsa a las mujeres del espacio público
Los resultados también evidencian que la violencia sexual no solo afecta la dignidad, sino que también restringe el derecho a la movilidad, al trabajo y a la participación social.
“El acoso sexual limita oportunidades, cambia rutas, modifica horarios, restringe libertades. Esta es una forma sistemática de exclusión.”
📌 ¿Qué se busca con este estudio?
- Que se reconozca públicamente la violencia que enfrentan las mujeres en el transporte.
- Que se generen políticas públicas reales, no simuladas, con perspectiva de género.
- Que se frene la normalización del acoso en Qrobús y otros espacios.
¿Hasta cuándo vamos a permitir que nuestras madres, hermanas e hijas vivan con miedo cada vez que suben a un camión?
📢 Es momento de exigir cambios, porque callar es ser cómplice.