El 1 de enero de 2024, un incendio forestal en las inmediaciones del Tángano, Querétaro, afectó alrededor de 100 hectáreas de terreno, principalmente de matorral y pasto seco. La Coordinación Estatal de Protección Civil informó que no hubo daños a la zona de reserva ecológica ni afectación a los árboles de la región, aunque la magnitud del fuego causó preocupación en las autoridades locales.
Para controlar el siniestro, se movilizó un equipo de brigadistas forestales de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (SEDEA), junto con personal de Protección Civil Municipal de Querétaro y Bomberos de Querétaro. Gracias a la rápida respuesta de los equipos de emergencia, el fuego fue sofocado y el control del incendio se logró sin mayores complicaciones.
Afortunadamente, no se registraron personas lesionadas, lo que permitió que las labores de extinción se desarrollaran con éxito. Aunque la quema afectó principalmente vegetación de la zona, las autoridades han resaltado la importancia de continuar con las medidas preventivas para evitar más incendios forestales en la región.