El sujeto de 48 años de edad reconoció su culpabilidad antes de ser agredido por la enfurecida turba La noche del jueves 19 de septiembre un hombre de 48 años fue linchado por una turba enfurecida en Jutai, un municipio del estado de Amazonas, Brasil luego de haber reconocido ante las autoridades locales que secuestró, abusó y mató a una niña de tan solo 1 año y 6 meses de edad y el caso le dio la vuelta al mundo debido a que distintas personas que participaron en el crudo episodio transmitieron las acciones a través de plataformas digitales, donde se generaron todo tipo de opiniones al respecto.

De acuerdo con el reporte oficial de la Policía Militar de Amazonas (PMAM), fue alrededor de las 16:00 horas cuando elementos de la Policía Civil realizaron la detención de Gregorio Patricio da Silva, de 48 años de edad, quien reconoció haber secuestrado, abusado sexualmente y asesinado a una niña de nombre Laylla, quien tan solo tenía 1 año y 6 meses de edad, por lo que fue llevado al Distrito Integrado de Policía número 56 para enfrentar a la justicia.

Población de Jutai hace justicia por propia mano Tras la aprehensión de Gregorio Patricio, decenas de personas de la región se dieron cita en las instalaciones donde se encontraba en calidad de detenido y entrada la noche la enfurecida turba intentó ingresar por la fuerza al referido edificio para tomar la justicia con sus propias manos, lo cual, provocó un intenso enfrentamiento con los elementos de la policía brasileña, quienes fueron rebasados fácilmente por la multitud, la cual, consiguió su objetivo y lograron llevar a la calle al hombre de 48 años de edad.

Una vez en la calle, Gregorio Patricio fue golpeado brutalmente, posteriormente, le rociaron gasolina y le prendieron fuego provocándole una muerte sumamente dolorosa y para finalizar, los pobladores usaron el cuerpo del sujeto como base de una enorme fogata y una vez que se aseguraron que los restos del hombre quedaron completamente calcinados la masa se dispersó. Las autoridades brasileñas reportaron que estos disturbios dejaron como saldo una motocicleta quemada y daños en un vehículo de la Policía Civil, además, algunas afectaciones leves en sus instalaciones, sin embargo, no hubo detenidos tras el linchamiento del sujeto de 48 años de edad, quien previo a su perturbadora muerte declaró que se deshizo del cuerpo de la niña lanzándolo a un río de la zona.

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