Querétaro, Qro.— Una veintena de mujeres egresadas del Instituto UNI, una universidad privada con sede en Querétaro, han alzado la voz denunciando un grave caso de omisión y posible fraude académico: tras haber invertido más de 200 mil pesos por persona en su formación profesional, no pueden ejercer legalmente ni continuar sus estudios por una razón devastadora: la escuela no cuenta con registro federal ante la SEP.
Perla Marina Aguilar Pacheco, una de las afectadas, relató que egresó en 2022 de la Carrera Técnica en Enfermería, y posteriormente realizó una nivelación para obtener el título de Licenciatura en Ginecología y Obstetricia. Si bien obtuvo su título y cédula estatal en 2023, no ha podido tramitar su cédula profesional federal, un requisito indispensable para ejercer en instituciones públicas, especializarse o ascender laboralmente.
“La sorpresa fue que la institución no está registrada ante la Dirección General de Profesiones”, declaró indignada.
Según Aguilar, son al menos 20 mujeres en la misma situación, atrapadas en un limbo legal que ha afectado no solo su vida profesional, sino también su salud emocional y su estabilidad económica. “No podemos seguir estudiando ni cambiar de trabajo, porque en todos lados nos piden la cédula federal”, afirmó.
La respuesta de la escuela ha sido la misma durante más de cinco años: que están “en trámite” los permisos ante la Secretaría de Educación Pública (SEP). Sin embargo, ni las autoridades estatales ni federales han ofrecido una solución, ya que indican que el trámite debe gestionarlo directamente la institución, no las alumnas.
“Hemos ingresado oficios, solicitado reuniones, acudido a la Secretaría de Educación del estado y a la delegación de la SEP, pero nadie nos da una salida”, denunció la egresada.
Este caso destapa una preocupante realidad en el sector educativo privado: la operación de instituciones sin reconocimiento oficial, que ponen en riesgo el patrimonio y el futuro de cientos de estudiantes.