Desde el ataque ocurrido en el bar Los Cantaritos el pasado 9 de noviembre, los operativos de inspección en diversos establecimientos, incluidos bares, restaurantes, vulcanizadoras y centros de adicciones, se han intensificado en todo el estado. A pesar de estos esfuerzos, el Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECA) informó que no se han realizado cierres ni suspensiones en centros de adicciones desde el inicio de los operativos.
Adolfo Ríos Méndez, comisionado del CECA, aseguró que, si bien este año se han registrado nueve suspensiones en centros de adicciones, ninguna de estas medidas está relacionada con los operativos que comenzaron después del ataque en el bar Los Cantaritos. Las inspecciones se han centrado en verificar que los centros de rehabilitación cumplan con las normativas vigentes, con la colaboración de otras dependencias, como Protección Civil, Riesgos Sanitarios y Derechos Humanos.
Ríos Méndez explicó que una suspensión implica que el establecimiento debe corregir las irregularidades detectadas antes de poder recibir a nuevos usuarios, mientras que la clausura representa el cierre total del centro. A lo largo de las inspecciones, los centros de adicciones revisados han cumplido con los lineamientos establecidos, lo que ha evitado la aplicación de sanciones más severas.
El comisionado destacó que el objetivo de estos operativos es garantizar la seguridad y el bienestar de los usuarios, y afirmó que las inspecciones continuarán en las próximas semanas para asegurar que los centros operen bajo los estándares adecuados. A pesar de los resultados positivos hasta ahora, el CECA hizo un llamado a los operadores de los centros de adicciones a seguir cumpliendo con los requisitos legales y de calidad para prevenir riesgos y mantener la seguridad en el estado de Querétaro.
