📍 Zapopan, Jalisco – A pocos días del 8 de marzo, familiares y colectivos feministas exigen justicia por el feminicidio de Astrid, de 49 años, y el homicidio de su hijo Ángel Fernando, de 15 años, quienes fueron brutalmente asesinados con un martillo en su hogar. El presunto agresor es su ex pareja, Eduardo, quien también dejó gravemente herida a la hija menor de la víctima, Isabela, de 9 años.
🔎 El crimen y la denuncia previa
📌 Astrid se encontraba en proceso de mudanza para alejarse de Eduardo, quien la había violentado física y psicológicamente.
📌 Un amigo de la víctima alertó a las autoridades tras perder comunicación con ella, temiendo que su ex pareja le hubiera hecho daño.
📌 Policías municipales acudieron al domicilio ubicado en el Fraccionamiento Capital Norte, en Zapopan, donde encontraron la trágica escena.
🚔 Hallazgo de las víctimas
👮♂️ A las 2:25 a.m. del 3 de marzo, elementos de la policía recibieron un reporte sobre una mujer herida en el domicilio.
🔴 En la vivienda encontraron el cuerpo de Ángel Fernando, el hijo de Astrid, con múltiples heridas causadas por un objeto contundente.
🔴 En una habitación superior, hallaron el cuerpo de Astrid con lesiones similares.
🆘 Isabela, la hija menor, fue localizada consciente pero gravemente herida, por lo que fue trasladada a un hospital para recibir atención médica.
⚠️ El presunto feminicida y su historial criminal
🔎 Eduardo, la ex pareja de Astrid, es el principal sospechoso y se encuentra prófugo.
⚖️ Se le vincula con otros dos feminicidios, lo que ha generado temor entre los familiares de Astrid y activistas.
🔍 La Fiscalía de Jalisco y la Vicefiscalía en Atención a Mujeres, Niñas, Niños y Adolescentes han iniciado las investigaciones bajo los protocolos de feminicidio para capturar al responsable.
🗣️ Clamor por justicia
El Colectivo Unidos por Jalisco, que apoya a víctimas de feminicidio y desapariciones, se sumó a la exigencia de justicia por Astrid y su hijo.
Familiares y activistas han solicitado que las autoridades actúen con rapidez para evitar que el agresor quede impune.
