Córdoba, Argentina. – Un estremecedor caso familiar ha vuelto a sacudir a la sociedad argentina. Fernando Albareda, un hombre actualmente recluido en la cárcel de Bouwer, rompió el silencio y confesó el asesinato de su madre, la adulta mayor Susana Montoya, ocurrido el 1 de agosto de 2024. A casi un año del crimen, Albareda declaró:
“Todavía estoy atrapado en esa noche. No sé si lo que hice estuvo bien o mal.” 😔
💰 ¿El motivo? Una discusión por dinero y una vida de traumas
El crimen, que causó conmoción en Córdoba, habría sido el resultado de una fuerte discusión por una indemnización de 76 millones de pesos, que la madre había prometido a los hijos de Fernando, pero que finalmente destinó al otro hijo. Sin embargo, Fernando asegura que la herencia fue sólo el detonante de una historia mucho más oscura.
En una entrevista con el medio La Voz, Albareda relató que su vida estuvo marcada por maltratos, abandono, abusos sexuales y omisión de cuidados, todo supuestamente cometido o permitido por su familia, principalmente por su madre:
“No soy un asesino, pero mi vida fue una cadena de abusos y abandono.”
🩸 Así ocurrió el crimen
El brutal asesinato de Susana Montoya, una mujer de la tercera edad, ocurrió en el patio de su vivienda. De acuerdo con las investigaciones y con el mismo testimonio de Fernando:
- La siguió al patio
- La estranguló con una soga
- La golpeó con piedras y ladrillos
- La apuñaló en el cuello
- Intentó quemar el cuerpo para eliminar evidencia
- Escribió una amenaza falsa en la pared para simular un ataque externo
Todo indica que intentó montar una escena falsa para desviar la atención. Sin embargo, las autoridades pronto lo identificaron como principal sospechoso.
👤 Un pasado marcado por el horror
Fernando afirma que su madre nunca lo defendió de los abusos que vivió en instituciones de menores, a donde fue internado siendo niño. Señala que ella firmó los documentos que lo enviaron a esos lugares, donde fue maltratado física y psicológicamente.
Además, recuerda con dolor la desaparición de su padre, Ricardo Fermín Albareda, quien fue secuestrado y torturado. Según Fernando, su madre jamás lo ayudó a procesar esa tragedia, lo que alimentó aún más su resentimiento.
⚖️ ¿Premeditación? El fiscal dice que sí
Aunque Fernando alega que actuó en medio de una crisis emocional, el fiscal del caso, Juan Pablo Klinger, sostiene que el crimen fue fríamente planeado. Entre los elementos que refuerzan esta hipótesis están:
- Eligió el momento cuando su hermano no estaba en casa
- Estacionó el auto a varias cuadras para no ser visto
- Preparó el lugar y la escena para simular otro tipo de crimen
Todo indica que el juicio contra Fernando Albareda iniciará próximamente, y será ahí donde se defina si este crimen fue el resultado de una vida de sufrimiento… o un acto calculado y despiadado.
