Los Cantaritos’ no volverá a abrir tras ataque armado, confirma Dirección de Gobierno de Querétaro

El bar Los Cantaritos, ubicado en Querétaro, no reabrirá sus puertas tras el ataque armado ocurrido el pasado 9 de noviembre, que dejó un saldo de 10 personas fallecidas y 13 heridas. Así lo informó Ricardo de la Vega, titular de la Dirección de Gobierno del estado, quien señaló que la decisión está respaldada por las investigaciones en curso y el historial del establecimiento.

Inmueble asegurado y en investigación

El inmueble permanece asegurado por la Fiscalía General del Estado como parte de las investigaciones relacionadas con el ataque. De la Vega confirmó que, aunque el bar cuenta con un folio de licencia en la Dirección de Gobierno, será la Fiscalía quien determine el estatus final del establecimiento.

«Los Cantaritos con seguridad no vuelve a operar,» afirmó de manera categórica el funcionario. Además, destacó que se está analizando el caso de otros establecimientos con reincidencias en clausuras para determinar si también perderán su autorización de operación.

Un antecedente trágico

El ataque armado ocurrido en Los Cantaritos conmocionó a la comunidad de Querétaro. La balacera dejó un saldo trágico de 10 personas fallecidas y 13 más heridas. Hasta el momento, las autoridades han detenido a dos de los presuntos responsables del ataque, mientras que las investigaciones continúan para esclarecer los hechos y dar con todos los implicados.

Revisión a establecimientos reincidentes

La Dirección de Gobierno de Querétaro también informó que está realizando un análisis sobre otros bares y negocios que han incurrido en reincidencias relacionadas con clausuras, violaciones a la normativa o incidentes de inseguridad. Este análisis busca reforzar las medidas de prevención y garantizar la seguridad de los ciudadanos en los establecimientos nocturnos de la entidad.

Compromiso con la seguridad

La clausura definitiva de Los Cantaritos refleja el compromiso de las autoridades de Querétaro con la seguridad de los ciudadanos y la regulación estricta de los establecimientos que incumplen la normativa o que representan un riesgo para la comunidad. Este caso se suma a los esfuerzos por reforzar la supervisión y evitar que hechos similares vuelvan a ocurrir.