Washington, D.C.- El gobierno de Estados Unidos ha iniciado una nueva fase en su política migratoria, enviando a migrantes detenidos a un centro de detención en la Base Naval de Guantánamo, en Cuba.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, compartió este jueves un video del primer vuelo de deportación, en el que se observa a migrantes escoltados por militares armados y encadenados de pies y manos mientras bajan de un avión militar en la base estadounidense.
“El presidente Donald Trump ha tomado medidas rápidas para expulsarlos inmediatamente del país y los mejores de nuestra nación están ayudando a liderar el camino en esta misión crítica”, declaró Hegseth en su mensaje en X (antes Twitter).
Migrantes deportados: ¿criminales o estigmatización?
La Casa Blanca informó que este primer vuelo trasladó a 10 migrantes, presuntos integrantes del grupo criminal venezolano Tren de Aragua, desde El Paso, Texas, hasta Guantánamo.
Sin embargo, la decisión de enviar a migrantes indocumentados a un centro de detención militar ha generado una ola de críticas y preocupación, ya que Trump y su administración han utilizado términos como “criminales” y “capos de la mafia” para referirse a los migrantes, pese a que vivir sin documentos en EE.UU. es una falta civil y no un delito penal.
El propio Trump ha justificado que los migrantes sean trasladados esposados, asegurando que se trata de una medida de seguridad para la tripulación de los vuelos.
Trump planea ampliar el centro de detención en Guantánamo
La administración republicana ha anunciado planes para habilitar hasta 30 mil camas en la base naval de Guantánamo, con el fin de detener temporalmente a migrantes indocumentados antes de deportarlos a sus países de origen.
El gobierno de Trump ha señalado que la medida busca “detener a los peores inmigrantes ilegales criminales que representan una amenaza para el pueblo estadounidense”, aunque diversas organizaciones han señalado que se trata de una estrategia política para justificar deportaciones masivas.
“Estos criminales pisotearon nuestra frontera previamente abierta para traer violencia y caos a nuestras comunidades”, agregó Hegseth en su declaración.
Campaña de deportaciones masivas
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump ha prometido llevar a cabo la mayor campaña de deportación en la historia de EE.UU., tildando a más de 11 millones de migrantes indocumentados como criminales y una amenaza para la seguridad nacional.
La medida ha sido calificada como extrema y violatoria de los derechos humanos, ya que no todos los migrantes detenidos tienen antecedentes penales. Expertos en inmigración han advertido que el uso de Guantánamo como centro de detención para migrantes representa un peligroso precedente en la política migratoria de EE.UU..
Se espera que la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, visite Guantánamo este viernes para inspeccionar las instalaciones y evaluar el plan de expansión del centro de detención.
🔴 La política migratoria de Trump sigue endureciéndose, mientras organizaciones de derechos humanos y líderes políticos critican el trato que reciben los migrantes en este proceso de deportación.