Una trágica historia ha vuelto a ser tema de conversación en redes sociales tras la difusión de un video que captura el momento exacto en que una mujer, identificada solo como Zhao, es atacada por un tigre durante un safari en el Parque de Vida Silvestre Badaling. El incidente, que ocurrió en 2016, ha desatado un intenso debate sobre la responsabilidad de los visitantes y la seguridad en los parques de vida silvestre.
Según reportes, Zhao estaba realizando el recorrido en un vehículo con su familia cuando, en un impulso por capturar fotografías más cercanas de los tigres, decidió salir del carro. Las imágenes muestran cómo Zhao, después de rodear el vehículo, intentó reingresar por la puerta del conductor, dándole la espalda a los felinos. Fue entonces cuando uno de los tigres se abalanzó sobre ella, arrastrándola hacia los arbustos.
Otros dos pasajeros del vehículo intentaron auxiliar a Zhao, pero también fueron atacados. A pesar de los esfuerzos del personal del parque por controlar la situación y rescatar a los heridos, Zhao sucumbió a las graves lesiones provocadas por el ataque.
El video, recientemente compartido en un canal de YouTube, ha generado un aluvión de comentarios. Muchos usuarios critican la decisión de Zhao de desobedecer las normas del parque, que claramente prohíben a los visitantes salir de sus vehículos. Otros expresan simpatía por la víctima y cuestionan si las medidas de seguridad del parque fueron suficientes.
A raíz del incidente, el parque cerró temporalmente sus puertas, aunque fue reabierto después de que las autoridades concluyeron que la culpa había sido de las víctimas por no seguir las reglas establecidas. Los familiares de Zhao intentaron demandar al parque, pero el zoológico ganó el caso demostrando que habían advertido claramente a los visitantes de no abandonar sus vehículos.
Más de cinco años después del trágico evento, el debate continúa en las plataformas digitales. Los internautas se dividen entre quienes culpan a la imprudencia de la víctima y quienes creen que el parque podría haber hecho más para asegurar la seguridad de sus visitantes. «La regla número uno era permanecer en tu auto», comenta un usuario, resumiendo la opinión predominante de que, en presencia de animales peligrosos, la cautela nunca debe ser ignorada.
